Mario Martin Rivera
Mario Martin Rivera
¿Qué es lo que forma al periodista profesional?
Algunos dirán que lo construyen atributos como la tenacidad, sagacidad y hasta la impertinencia, armas que Luis Enrique Ramírez Ramos esgrimió con el filo adicional de la ironía, según la aguda percepción de Elena Poniatowska, amiga personal y prologuista de su libros”La muela del juicio”
En efecto, son herramientas fundamentales para el periodista que hurga, investiga y molesta. Pero no son elementos formadores determinantes.
Otros dirán que el dominio del lenguaje, la intuición, el desarrollo de la observación para mirar lo que otros no ven y el olfato fino para oler de golpe el tufo de la noticia. Son utensilios que también deben ir en el equipaje del comunicador, pero tampoco son definitivos.
Todos los recursos anteriores son irrelevantes cuando hay carencia de credibilidad que en esta profesión lo es todo, absolutamente todo. Entonces, lo que construye y forma al periodista es la calidad de sus fuentes de información.
Es decir, un periodista sin credibilidad difícilmente incidirá en la generación de opinión pública que es -o debe ser- el propósito final de quien analiza, comenta y publica.
Luis Enrique acertó al bautizar su columna “Fuentes Fidedignas”, recurso legal que utilizamos los periodistas para proteger la identidad del proveedor de información privilegiada.
Es común que en la redacción de columnas de opinión o reportajes de investigación utilicemos “fuentes dignas de todo crédito”, “fuentes confiables” o aun mejor “fuentes fidedignas” revelaron tal o cual asunto. Al proteger a nuestras fuentes, garantizamos el flujo constante de información verídica y certera.
La dimensión profesional de Luis Enrique era directamente proporcional a la calidad de sus “fuentes fidedignas” -convertida en diario digital el 7 de junio de 2012- que hoy llega a su onceavo aniversario como evocación de la puntería fina del compañero asesinado arteramente un mal día de mayo de 2022.
En el octavo aniversario de su empresa, Luis Enrique destacó el slogan de su diario digital: “referente noticioso de Sinaloa”. Lo fue como extensión de su mordaz, irónica y certera columna en la que compartió información confiable de “Fuentes Fidedignas”.
Sus colaboradores y amigos honran hoy su memoria al tener viva esta referencia noticiosa que evitará que algún día olvidemos al amigo y al colega. Enhorabuena!
