Ernesto Zazueta, presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México, destacó algunas condiciones que hay para quienes podrían visitarlo en su reserva que no será abierto al público en su totalidad
Culiacán, Sinaloa.- El elefante BigBoy formará parte de una reserva en donde la comunidad científica y estudiantil podrá participar en su cuidado y preservación con programas de estudio y trabajo ligados a su desarrollo integral, destacó Ernesto Zazueta Zazueta, presidente de AZCARM.
Señaló que el paquidermo pasa sus últimos días en las instalaciones del Zoo de Culiacán donde se le han dado los tratamientos que le han permitido obtener mayor peso y por ende masa muscular, se le observa más saludable donde sus patas, que tenían hongos ya están en su etapa de curación.
“Ya está en condiciones de trasladarse, estamos en espera de que el grupo de especialistas en elefantes que lo han estado trabajando lo vienen a valorar a ver si ya lo dan de alta”, destacó Ernesto Zazueta.
Precisó que para la adecuación de la reserva, que dará hogar definitivo al elefante, se ha tenido la asesoría de expertos internacionales, a través de la Asociación de Zoológicos Americana, así como de un equipo de veterinarios que asesoran el diseño de esas instalaciones.
“ Tenemos pensado que Big Boy pues es un embajador, vamos a invitar grupos, no va a estar abierto al público, va a ser todo en visitas digitales; tenemos contemplado invitar grupos de veterinarios, grupos de biólogos para que hagan sus prácticas, todo completamente gratuito. Vamos a poner una estancia para que ellos puedan hacer sus estancias ahí”, explicó.
Ernesto Zazueta aclaró que el elefante estará monitoreado de manera permanente no sólo para para cuidar su seguridad, sino para que la comunidad científica pueda participar en su desarrollo integral y adaptación a este nuevo lugar que sin duda le dará una mejor calidad de vida.
El presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México, indicó que la idea de donaciones al proyecto BigBoy es no sólo para apoyar la adecuación de la reserva, sino para destinar recursos de este mismo programa a becas con las cuales los jóvenes estudiantes de biología, veterinaria u otra carrera ambiental se puedan desarrollar.
Aclaró que la reserva no estará abierta al público como si fuera un parque, pero si podrán acudir grupos cuyo objetivo sea ampliar sus conocimientos en vida silvestre, biología u otras áreas ligadas al tema de investigación ambiental.
Explicó que más adelante este lugar no sólo será un hogar para elefante sino que se contempla ampliarlo a otras especies, donde se trabajará para que haya una convivencia segura y tranquila para los animales en un entorno de mayor libertad y condiciones similares a su hábitat.
El presidente de AZCARM invitó a la ciudadanía a conocer al elefante, e informarse sobre sus condiciones de vida antes y hoy; pero sobre todo el gran proyecto de una vida digna lo más adecuada posible a su hábitat ante la dificultad que supone el enviar a todo este tipo de animales que han nacido y criado en circos a los lugares de donde son originarios sus padres o abuelos.