Evitar diversos alimentos y aprovechar los nutrientes de otros más te permitirá mantener un buen estado de salud y prevenir enfermedades.
Llevar una dieta sana a lo largo de la vida repercutirá en la prevención de la desnutrición, así como en evitar enfermedades no transmisibles y otros trastornos. Aunque en la época actual esto se vuelve más complejo debido a la gran cantidad de alimentos procesados y los estilos de vida poco sanos.
Lo anterior ha derivado en que las personas consuman más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal. En contraparte la mayoría no come suficientes frutas, verduras y fibra dietética como los cereales integrales.
La composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable está determinada por las características de cada persona y otros factores como el contexto cultural. Sin embargo, “los principios de una dieta sana siguen siendo los mismos”, sostiene la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Dieta sana
En concordancia, Angela Snyder, nutrióloga del Hospital Houston Methodist agrega a través de un comunicado: “Cuando hablamos de una dieta equilibrada o balanceada estamos hablando de comer alimentos en las proporciones que ayuden a que nuestro cuerpo funcione de manera óptima.”
De esta forma se pueden evitar enfermedades como la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebro vasculares e, incluso, el cáncer.
PRINCIPIOS DE UNA DIETA SANA
Para mejorar tus hábitos alimentarios es necesarios seguir estas recomendaciones de la OMS:
- Incluir frutas, verduras, legumbres (como lentejas y alubias), frutos secos y cereales integrales (maíz, avena, trigo o arroz moreno no procesados).
- Consumir al menos 400 gramos de frutas y hortalizas al día. Evita las cantidades excesivas de vegetales como las papas, las cuales tienen mucho almidón.
– Una persona con un peso corporal saludable requiere consumir aproximadamente 2,000 calorías al día. Partiendo de aquí, menos del 10% de la ingesta calórica debe provenir de azúcares libres, es decir, aproximadamente 50 gramos. Lo ideal sería un consumo inferior al 5%.
- Las grasas saturadas también inciden en una dieta sana, la cual debería contemplar menos de un 30% de la ingesta calórica. Éstas proviene de la carne grasa, la mantequilla, el aceite de palma y coco, el queso, entre otros. Es preferible consumir grasas no saturadas que se encuentran en el pescado, aguacate, frutos secos, así como en los aceites de girasol, soja, canola y oliva.
- De igual forma es importante no ingerir más de 5 gramos (una cucharada, aproximadamente) de sal al día y debería ser yodatada.
Al seguir estos consejos puedes implementar una dieta sana, la cual contribuya a mantener tu salud en buen estado.