El consumo de fentanilo y el riesgo de recaídas hacen que diciembre sea uno de los periodos más delicados
La Navidad no es igual en todos los hogares: hay quienes pasarán las fiestas reunidos en familia, otros estarán en hospitales y, en muchos casos, las ausencias se harán presentes en la mesa. Así ocurre también con las personas que se encuentran en la batalla contra las adicciones en Hermosillo.
Valeria Hinojos Soto, directora del Centro Femenil Tierra Prometida, compartió que, si bien son fechas sensibles, también son momentos en los que es más probable que ocurra una recaída.
Con el fin de que las fiestas decembrinas no pasen desapercibidas, desde su fundación en 2021, crean un ambiente acogedor para las residentes, donde incluso las familias pueden reunirse a cenar y bailar.
“Tengo desde 2021 cayendo en un centro de rehabilitación. Las tres ocasiones en que he estado he pasado Navidad y Año Nuevo (…) Todo era llorar y extrañar a mi familia, pero era algo necesario”, compartió una de las internas, cuyo nombre ha sido protegido.
La mujer de 32 años explicó que, aunque es doloroso, una persona con adicciones no sufre por no pasar las fiestas con su familia, sino por estar lejos del consumo.
“Uno nunca sabe cuándo una persona se va a pasar con la dosis. Tú, por querer tenerla ahí y decir ‘ay, va a pasar Navidad y Año Nuevo allá y le va a doler’, no es cierto. Lo único que nosotros pensamos es que no vamos a poder consumir. Entonces internar es lo mejor, sin importar la fecha”, afirmó.
El Centro Femenil Tierra Prometida es uno de los lugares visitados por el programa Por Uno Más Hermosillo, donde brindan acompañamiento emocional y espiritual a personas y familias que reciben tratamiento residencial en centros de rehabilitación.
“Hay una población en Hermosillo para la que estas fechas son de preocupación, de ansiedad. Se les aprieta el estómago porque saben que su familiar, el 24 en la tarde, puede salir y quién sabe a dónde vaya, qué consuma. Es una incertidumbre. Hay quienes los internan antes o después de Navidad; cualquiera que sea el caso, siempre será una de las opciones más amorosas”, dijo Gustavo Buelna, director de la asociación.
El joven de 28 años, quien ha trabajado en centros de rehabilitación durante los últimos dos años, señaló que además del consumo de cristal, marihuana y alcohol, sustancias que ocupan los primeros lugares, Hermosillo ha registrado un incremento preocupante en el uso de fentanilo, presente en hasta el 26.7% de los ingresos.




