La tortillería de Guanajuato podría ser una mirada temprana hacia cómo evolucionarán estos negocios en el país: entre tradición y tecnología, buscando equilibrio entre eficiencia, higiene y el encanto cultural que caracteriza a uno de los productos más importantes de la mesa mexicana.
MÉXICO-. En México, la tortilla es un elemento indispensable: acompaña la mayoría de los platillos y forma parte esencial de la vida cotidiana.
Por ello, las tortillerías suelen tener una identidad muy clara: espacios pequeños, familiares y caseros, cuya calidez forma parte de su propia iconografía cultural.
Sin embargo, en días recientes se viralizó el video de una tortillería en Guanajuato que rompe por completo con el concepto tradicional.
Un usuario compartió su visita al establecimiento, el cual combina la atención humana con un sistema tecnológico que sorprendió a miles.
Una experiencia futurista para comprar tortillas
Aunque el local cuenta con una trabajadora que entrega los paquetes de tortillas, la operación se apoya en una máquina junto a la barra principal.
El dispositivo permite introducir monedas, seleccionar cuántos kilos se desean, realizar el pago y recibir un ticket.
Con ese comprobante, la empleada simplemente entrega el pedido y el cliente puede retirarse en segundos.
La innovación llamó la atención tanto por su diseño como por lo que representa para el futuro del comercio tradicional.
Usuarios describieron el lugar como “higiénico, avanzado y futurista”, al tiempo que abrían debate sobre los cambios que estas herramientas podrían traer al sector.
- “Estoy seguro que la dueña lo hizo para contrarrestar el robo de empleados.”
- “Me interesa una.”
- “Creo que con esto también serían menos robos y más agilidad.”
La propuesta generó opiniones divididas: algunos celebraron la eficiencia y la seguridad; otros mostraron nostalgia por el trato cercano de las tortillerías tradicionales.
La tortillería de Guanajuato podría ser una mirada temprana hacia cómo evolucionarán estos negocios en el país: entre tradición y tecnología, buscando equilibrio entre eficiencia, higiene y el encanto cultural que caracteriza a uno de los productos más importantes de la mesa mexicana.




