Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se rompieron en 1959 tras el triunfo de la revolución cubana liderada por Fidel Castro.
El Gobierno de Estados Unidos, liderado por el presidente saliente Joe Biden, ha retirado este martes a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo a pocos días de que el republicano Donald Trump, que impuso esta medida durante su primer mandato, asuma el cargo el próximo 20 de enero.
Biden ha indicado que el Gobierno cubano “no ha brindado ningún apoyo al terrorismo internacional” durante el último periodo de seis meses y ha proporcionado seguridad de que no lo hará en un futuro, según ha informado la Casa Blanca.
Asimismo, en un memorándum dirigido a los altos funcionarios estadounidenses ha subrayado que Washington “mantiene como objetivo central” de su política “la necesidad” de que exista “más libertad y democracia”, así como “mayor respeto por los Derechos Humanos” en Cuba. De igual forma, Biden ha comunicado su decisión al Congreso.
Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se rompieron en 1959 tras el triunfo de la revolución cubana liderada por Fidel Castro, a la que Washington respondió con un duro bloqueo y la inclusión del país en la lista de patrocinadores del terrorismo en 1962.
Durante el mandato del expresidente demócrata Barack Obama se restablecieron en cierta medida las relaciones, si bien la llegada de Donald Trump a la Presidencia en 2017 provocó un endurecimiento de las restricciones contra Cuba.
El Gobierno de Cuba considera que Estados Unidos tiene “responsabilidad directa” en una situación económica dentro de la isla que las propias autoridades reconocen como “difícil” marcada entre otras cosas por “la depresión e insuficiencia de abastecimientos y servicios esenciales”.