La cuenca del Congo, la segunda selva tropical más grande del mundo, ha revelado su asombrosa riqueza natural con el descubrimiento de 742 nuevas especies entre 2013 y 2023. Este hallazgo destaca la biodiversidad única de la región y subraya la importancia de proteger uno de los ecosistemas más vitales del planeta.
El informe titulado Nueva vida en la cuenca del Congo: una década de descubrimientos de especies (2013-2023) documenta los esfuerzos de cientos de científicos que han identificado nuevas especies en múltiples grupos taxonómicos:
- Plantas: Más de 430 especies, incluidas orquídeas, helechos y plantas de géneros como Coffea e Hibiscus.
- Invertebrados: Hormigas, escarabajos, arañas y luciérnagas.
- Peces: Bagres y peces eléctricos únicos.
- Anfibios y reptiles: 22 especies de ranas, cocodrilos de hocico fino, cobras y serpientes ciegas.
- Aves y mamíferos: Un búho, un petirrojo, murciélagos, musarañas, ratones y un nuevo mono.
Los países que lideraron los hallazgos son la República Democrática del Congo, Gabón y Camerún, donde la interacción entre comunidades locales y científicos fue clave para identificar especies que, aunque nuevas para la ciencia, eran conocidas por las poblaciones indígenas.
La importancia de la cuenca del Congo
Conocida como el «pulmón de África», la cuenca del Congo es el mayor sumidero de carbono tropical del mundo y un refugio crítico para especies en peligro de extinción. Abarcando seis países, sus bosques proporcionan alimentos y recursos esenciales para las comunidades indígenas y locales.
La región enfrenta grandes desafíos ambientales debido a la deforestación, la minería y el cambio climático. Sin embargo, el informe resalta los esfuerzos de conservación en curso, incluyendo:
- Programas de biovigilancia: Herramientas esenciales para monitorear la biodiversidad.
- Certificación FSC: Un método comprobado para proteger los ecosistemas en concesiones madereras, demostrado por estudios en Gabón y la República del Congo.
- Áreas protegidas: Los gobiernos de la región han acordado destinar el 30% de sus tierras a la conservación para 2030.
El papel clave del conocimiento indígena
El informe destaca que muchas de las especies descritas recientemente ya eran conocidas por las comunidades locales, que han vivido en armonía con estos ecosistemas durante generaciones. Este conocimiento tradicional no solo ha sido invaluable para los descubrimientos, sino que también es fundamental para las estrategias de conservación a largo plazo.
Un llamado a proteger la biodiversidad
La cuenca del Congo es un ejemplo de la rica biodiversidad que aún espera ser descubierta en el mundo. Este hallazgo no solo celebra la maravilla de la naturaleza, sino que también refuerza la necesidad urgente de proteger estos ecosistemas para las generaciones futuras.
El esfuerzo conjunto entre gobiernos, científicos y comunidades locales es esencial para garantizar que el increíble patrimonio natural de África central siga siendo una fuente de vida y conocimiento para el planeta.
Fuente: WWF.