De los cuatro homicidios, tres estaban totalmente ligados a las riñas y se cometieron con arma blanca, y por lo que hay tres detenidos.
Las riñas entre aficionados, después de la derrota 1-0 de la selección colombiana en la final de la Copa América ante Argentina, dejaron en Bogotá cuatro personas asesinadas, aunque la jornada fue “tranquila”, según informó este lunes la Policía.
“De momento lo que reportamos del día de ayer hasta esta madrugada es un parte completo de tranquilidad”, dijo en una rueda de prensa el director encargado de la Policía Nacional de Colombia, brigadier general Nicolás Alejandro Zapata.
Lo más grave fueron los cuatro homicidios, de los cuales tres estaban totalmente ligados a las riñas y se cometieron con arma blanca, y por lo que hay tres detenidos.
En total, las autoridades atendieron más de 5 mil llamadas asociadas a riñas y a las reuniones que hubo en todo el país tanto en público como en privado para ver el futbol, se impusieron mil 200 comparendos (multas) y se detuvo a 25 personas.
Los desmanes más graves se produjeron en varios barrios de la capital, Bogotá, y su municipio vecino Soacha, por “riñas entre los propios hinchas, pero controladas por la Policía”, estimó el director encargado de la Policía.
Incluso desde antes del comienzo del partido hubo peleas entre asistentes debido a que llegó más gente de la que se esperaba, lo que sumado al consumo de licor dio pie a peleas y discusiones.
También hubo grescas en la plaza central de Soacha, municipio al sur de Bogotá, que obligaron a la intervención de la Policía y algunas personas denunciaron en las redes sociales violencia y exceso de fuerza por parte de los uniformados que intentaban controlar a los borrachos.
Además la Policía detalló que para esta tarde, que se espera que lleguen los jugadores colombianos y haya un gran recibimiento en la capital, se ha dispuesto a mil 500 efectivos.