La generación del Centralismo Democrático, poco o nada sabe de la participación de las bases en el partido, acostumbrados al revisionismo de Arnoldo Martínez Verdugo, ese personaje del PCM y las purgas internas por orden de Moscú que llevo a la traición a la juventud Universitaria del 68 y 70 y que hoy, desde el poder hacen lo que saben hacer: ser antidemocrátlcos, con el ingrediente de la renuncia a las ideas en los años 90’s como parte de ese partido de traidores llamado PRD.
Esperemos la rectificación o el fin como pudimos en España, porque el reinicio de Sistema se les está haciendo agua.
Se preguntarán después ¿Por dónde regreso la derecha? Siempre ha estado, en el PRIANDMOR y en el PRIANDAS en Sinaloa, nunca se ha ido, este fue solo un suspiro para lo que viene, los códigos de conducta siguen en el proceso de descomposición, porque lo que deja al gran capital es la debilidad institucional de las naciones, su distopía, en donde el orden, la tranquilidad, son un lujo que se debe pagar individualmente como el aire, no bastan los impuestos.
Así, el madruguete del Quirinismo y del Rochismo, su operador, da muestra de la descomposición y del afán de controlarlo todo, pero además de la falta de oficio político, en un pragmatismo que no guarda las formas, Rubén Rocha Moya ha seguido el guion para ganar, aliarse con el dinero, con el clientelismo y perder la batalla Cultural, porque ahí se tiene que formar a la ciudadanía y carece de esa condición, su hegemonía es de un pequeño grupo, no de pueblo, no de masas, no de Revolución y menos de ideales.
Saldrá de esta deriva conservadora el PRIANDMOR, es complicado, se ha vuelto sistémico, es funcional al reinicio de Sistema, aspecto que nos llevará a las calles, con instrumentos distintos.