Sus dueños tuvieron que recurrir a tácticas desagradables para ayudarla y recuperar el dinero
Nueva York. Una pareja de Pennsylvania no sale aún de su asombro luego de que su perra Cecil, una goldendoodle de 7 años, se comiera 4 mil dólares que habían dejado en un sobre en la cocina con el que pagarían unas mejoras a su hogar.
“No podía creer que eso hubiera sucedido. Y lo curioso es que encontré una esquina de un billete de 100 dólares en su recipiente de agua”, comentó Carrie Law al canal 4 de la cadena NBC.
Su esposo, Clayton, recordó entre risas que caminaba por la casa haciendo cosas y que cuando regresó a la cocina “Cecil estaba parada sobre una pila de dinero que estaba mutilado”.
La pareja aseguró que su mascota nunca había hecho nada irregular y que disfrutaba pasando el día en el sofá.
El perro parecía estar muy bien, hasta que esa noche, Clayton escuchó un ruido que le parecía familiar: se trataba de su mascota a punto de vomitar, tras lo cual recuperaron parte de los billetes, que tuvieron que unir como un rompecabezas.
“Salté de la cama y me aseguré de que no vomitara allí”, dijo Clayton: Luego, tuvo que revisar lo que había vomitado Cecil. “Y me di cuenta: ‘Aquí hay muchos billetes a medio comer de 100 y 50 dólares”, explicó.
Para recuperar parte de su dinero los Law tuvieron que buscar también en las heces de su mascota, lavar el dinero y unirlo.
Una vez tuvieron los 3 mil 550 dólares listos fueron al banco -debían tener más del 50% de cada billete para poder recuperarlo- donde les dijeron que lo ocurrido sucede a menudo “porque el dinero capta muchos olores, especialmente si se usa en la industria alimentaria”, indicó Clayton a la cadena.
La pareja contó su historia en las redes sociales y se hizo viral.
“Estamos felices de que haga reír a la gente. Creo que mucha gente puede sentirse identificada porque todos hemos tenido una mascota o un niño que ha hecho algo tonto como esto de una forma u otra y no puedes enojarte con ellos”, señaló Carrie.
Los usuarios dejaron en el video comentarios como “para qué darle comida cara si mejor puedes darle dinero”, “esto es el verdadero lavado de dinero”, mientras que otra expresaba su preocupación acerca de que ese dinero volviera a estar en circulación.