Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en México; ¿cómo podemos protegernos?

Las enfermedades del corazón son la primera causa de muerte en México y en el mundo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que las enfermedades cardiovasculares cobran 17.9 millones de vidas al año y prevé que las cifras aumenten.

El año pasado los problemas del corazón fueron la primera causa de muerte a nivel nacional, por encima del COVID-19 y la diabetes mellitus.

De acuerdo con el estudio preliminar ‘Estadísticas de Defunciones Registradas correspondientes a 2021′, se registraron 226 mil 703 muertes relacionadas con enfermedades del corazón; seguido por las ocasionadas por COVID-19, que sumaron 224 mil 239, y diabetes mellitus, con 142 mil 546 bajas.

Ante este panorama, las autoridades de salud piden mejorar los hábitos de alimentación y realizar una mayor cantidad de actividad física para así evitar futuras complicaciones. No obstante, en un país como México, en el que la jornada laboral ocupan una gran parte del día, y los alimentos chatarra son más accesibles que los saludables, seguir las recomendaciones al pie de la letra representa un problema.

El Financiero consultó a Ernesto Lozano, uno de los especialistas de la Clínica de Cardiología Heart and Health, quien nos compartió medidas de prevención realistas para cuidar nuestro corazón.

Protege tu corazón con actividad física
Los cardiólogos recomiendan 150 minutos de actividad física a la semana, es decir, 30 minutos al día por cinco días para cuidar la salud cardiovascular.

Sin embargo, las jornadas laborales, las tareas domésticas o los tiempos de transporte pueden complicar este objetivo, por ello Ernesto recomienda empezar con 10 minutos de ejercicio al día y poco a poco aumentar el lapso.

“150 minutos como mínimo a la semana es lo ideal pero desde menos tiempo podemos obtener ciertos beneficios, hay estudios que demuestran que solamente con salirnos del estrato más sedentario de la población podemos disminuir de forma significativa nuestro riesgo”, explica.

Ya sea que te decidas por una actividad aeróbica, por caminar, correr, o ir al gimnasio, 10 minutos pueden hacer la diferencia.

Cuida las porciones de lo que comes
Además de elegir alimentos saludables cuando tengas oportunidad, el especialista recomienda poner especial atención en las porciones. Para ello puedes usar de guía ‘El plato del bien comer’ cuando hagas las compras en el super o en el mercado.

“Este plato nos enseña de una forma visual y muy sencilla cuáles son las porciones que debemos comprar de una serie de alimentos a los que tengamos acceso, eso nos va a ayudar a tener mejores hábitos alimenticios”, señala.

Recuerda evitar las harinas, azúcares, alimentos altos en sodio o con abundantes grasas saturadas.

Atiende tu salud mental
El estrés es uno de los factores que propician las enfermedades cardiovasculares.

Para adaptarse al estrés, el organismo sufre una serie de cambios fisiológicos que, de perpetuarse, vuelven al cuerpo vulnerable ante la enfermedad cardiovascular, describe el Libro de la Salud Cardiovascular.

Para evitarlo, Ernesto recomienda respetar las horas de sueño y utilizar el tiempo libre para dispersar la mente con alguna actividad física, esto ayudará a reducir los niveles de estrés y a tener una sensación de satisfacción global de salud.

Evita alcohol, tabaco y drogas en general
El tabaquismo es una de las principales causas de enfermedad cardiovascular y provoca una de cada cuatro muertes relacionadas con esta afección, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

Sobre el alcohol, Ernesto señala que hay ciertos ciertos licores que tienen un efecto cardiotóxico importante que favorecen la aparición de patologías del corazón como la hipertensión arterial.

Evitarlos reducirá el riesgo de sufrir algún problema cardiovascular.

Un chequeo del corazón al año no hace daño
Un chequeo general anual que incluya la medición de la presión arterial es lo recomendable para identificar si existe algún tipo de riesgo, sugiere el especialista.

En caso de detectar síntomas como dolor de pecho opresivo que irradia hacia brazos, hombros, mandíbula o espalda, acompañado de sudoración y de falta de aire, lo más recomendable será acudir al centro de salud o con el cardiólogo de cabecera.