Desde 2020, Perla Ediciones ha publicado 12 libros con el objetivo de reivindicar la voz femenina y democratizar títulos clásicos en español
“El canon del sobrenatural y del fantástico tiene, como todo, puros protagonistas hombres y nosotros nos hemos formado con voces de varones. Entonces hay que hacer una tarea de rescate bien interesante para desempolvar libros de los que nunca hayamos escuchado antes”, afirma Wendolín Perla, fundadora de Perla Ediciones, en entrevista para Forbes México.
Desde su inicio en el siglo XV, la literatura fue un terreno producido y destinado para hombres, solo falta recordar a las autoras como Amantine Dupin, Mary Ann Evans y Jane Austen, quienes tuvieron que adoptar pseudónimos masculinos para publicar sus obras en los siglos pasados, e incluso la contemporánea J. K. Rowling, autora de la saga Harry Potter mundialmente galardonada y parte de la cultura inglesa, tuvo que prescindir de su nombre por el sexismo editorial que aún en este siglo se sufre.
Ante esto, con el propósito de reivindicar la voz de las mujeres y traducir libros clásicos de la literatura universal, la emprendedora mexicana fundó su editorial independiente en agosto de 2021, priorizando géneros como la fantasía, mitología, horror y ciencia ficción.
“En Perla Ediciones nos interesan las historias poderosas con atmósferas irresistibles, personajes entrañables y narrativas que tiendan puentes entre lectores alrededor del mundo. Nos apasionan la mitología, el folclor, la historia oral, las leyendas, los cuentos de hadas, los clásicos contemporáneos más divertidos y originales, la literatura fantástica y el horror sobrenatural más allá del canon, la reivindicación de la voz femenina, las tierras remotas y todo cuanto derribe prejuicios y haga volar la imaginación”, indica la editora.
Perla descubrió su pasión al leer la edición en inglés del libro escrito por Lord Dunsany en 1924 y titulado La hija del rey del país de los elfos, por lo que de inmediato supo que debía traducirlo al español para que la historia llegará a más personas.
Luego de renunciar a Random House, una de las principales editoras en lengua inglesa del mundo, Perla comenzó a enfocarse en la traducción y publicación de este libro y otros más. Sin embargo, enfrentó su primer reto: la falta de financiamiento.
“Lo primero que se me ocurrió fue hablarles a amigos para pedirles dinero prestado”, asegura.