Ante los costos de enfrentar una emergencia de salud, te darás cuenta de que la prevención es lo mejor para ti, tu familia y tu bolsillo
Ciudad de México. De acuerdo con el INEGI, en la última década la población del país aumentó 14 millones, alcanzando los 127 millones de habitantes. Aunado a esto, la esperanza de vida pasó de 73.97 años en 2010 a 75.73 años en 2020.
Esta situación genera una mayor demanda de nuevos y mejores servicios de atención médica para los mexicanos, no obstante, se ha registrado una disminución en el gasto que el país destina al sector salud. ¿Cómo afecta esta disminución el acceso a servicios médicos de calidad?, ¿cuánto cuesta enfermarse y ser atendido en una institución pública en México? Echa un vistazo a los números para que una emergencia médica no te encuentre desprevenido.
Según los reportes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los países que han tenido importantes mejoras en su cobertura universal de salud han invertido 6% o más de su Producto Interno Bruto (PIB) en el sector salud. Sin embargo, en la última década, México ha reducido su inversión en salud pasando de 2.8 a 2.5% de su PIB. De acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), esa cifra se encuentra por debajo de las recomendaciones internacionales y de las estimaciones con bases epidemiológicas y demográficas.
La disminución del porcentaje invertido inevitablemente afecta el gasto per cápita de cada institución, es decir, el gasto disponible por persona y los recursos a los que tendría acceso cada individuo.
¿Cuánto cuesta enfermarse y ser atendido en una institución pública?
Ahora bien, ese porcentaje de 2.5 se divide entre los siete subsistemas de salud del país: IMSS, ISSSTE, Pemex, Sedena, Semar, SSA e IMSS Bienestar.
Esa reducción afecta todos los aspectos involucrados durante la atención médica y sus costos, incluso para quienes no son derechohabientes de las instituciones. De acuerdo a información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) -que brinda atención a la población de trabajadores y pensionados del sector privado, así como a sus familiares y/o dependientes- los costos unitarios de atención para no derechohabientes en 2021 son:
Consulta de medicina familiar: $831
Consulta de especialidades: $1,463 en unidades de segundo nivel (hospitales generales de la zona) y $2,309 pesos en unidades de tercer nivel (alta especialidad).
Atención de urgencia: $671 en unidades de primer nivel y $1,365 pesos en unidades de segundo nivel.
Sesión de quimioterapia: $7,090
Sesión de hemodialisis: $5, 021
Día de hospitalización: $9,272
Día de paciente en terapia intensiva: $44,151
Terapia psicológica: $1,324
Intervención tocoquirúrgica: $12,335
Día de paciente en incubadora: $9,272 en unidades de segundo nivel
Al sumar el costo de la consulta médica; la hospitalización, en caso de requerirla en una emergencia; y los medicamentos, la cifra se vuelve exorbitante.
En vista de que los cambios que se realizan a nivel nacional impactan de manera directa nuestro bolsillo es fundamental tener conocimiento del costo que un imprevisto médico puede llegar a tener. Recuerda que mantenerte informado es la principal herramienta para organizarte, cuidar de tu salud y prevenir que una enfermedad afecte de manera importante tus finanzas personales.
*Brenda Sandoval es médica cirujana egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México especializada en creación de contenido y traducción médica.