Las peticiones de tener un pato como mascota se ha disparado, pero ya se han rescatado a varios de ellos por abandono de sus dueños

Mascotas hay para todos los gustos, y mientras la mayoría se decantan por convertir en un miembro más de la familia a un perro, gato o pájaro, cada vez son más los que deciden tener un pato como mascota. En los últimos tiempos, todavía más, y la culpa de todo la tiene una moda de TikTok.

Todo comenzó el pasado 22 de abril, cuando Carew Ellington, un adolescente estadounidense con casi 4 millones de seguidores en TikTok, compartió un vídeo en su cuenta en el que le pide a su madre un pato como mascota. La mujer accede, eso sí, si el joven consigue más de un millón de ‘me gusta’. Dicho y hecho, sus seguidores se pusieron manos a la obra y, en tan solo dos días, consiguieron su objetivo. Su madre accedió, y obtuvo a su pequeño patito como mascota, del que lleva subiendo vídeos sin descanso, con el último de ellos diciendo que iba a dejar libres a los patitos tras un mes viviendo con él.. Ahora bien, lo que probablemente no esperaba era convertir a estos animales en la mascota de moda entre los ‘influencers’; y ni mucho menos, que esa tendencia supusiera un problema a nivel mundial.

El adolescente consiguió a sus patitos, desatando una tendencia a nivel mundial.

Tener un pato como mascota no es un problema, siempre que reciba los cuidados adecuados. El problema surge cuando la locura por poseer una cría de pato alcanza tales dimensiones que algunas tiendas ya han tenido que decir no a las ventas de estos animales. A su vez, las organizaciones protectoras de animales están dando la voz de alarma, insistiendo en que “no es un animal para lo que la gente quiere”. La situación se volvió más complicada en países ganaderos, sobre todo en Irlanda, país donde parece que la tendencia habría calado más de la cuenta. Eso sí, en su vertiente más negativa: se acogen muchos patos, sí, pero también se abandonan.

Según el diario local The Irish Post, casi un centenar de ellos habrían sido reubicados por la Sociedad de Dublín para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (DSPCA) en las últimas semanas, después de que los patitos se vendieran incluso en las calles de Dublín por unos pocos euros. Patos de corral, los típicos que vemos de color amarillo, perfectos para la foto ‘perfecta’ en redes sociales; los mismos patos que son abandonados una vez dejan esa fase de cría.

El joven ‘influencer’ dejó libres a los patos un mes después.

Sin embargo, la moda sigue al alza.En España, las búsquedas de pato se incrementaron considerablemente a finales del mes de abril, y continúa hasta la fecha. Si a pesar de los consejos prefieres incluir a una de estas aves en tu familia, conviene saber que requiere de una serie de cuidados especiales. Primero, necesitan una vivienda adecuada que satisfaga sus necesidades físicas, sociales y de comportamiento, ya que los patos son animales sociales, y es preferible que permanezcan con otros animales de su especie. También necesitan poder moverse libremente, ya que son muy curiosos, por lo que un amplio jardín donde dispongan de un pequeño corral protegido del sol y las inclemencias del tiempo, y un estanque donde puedan nadar (una piscina para niños de unos 20cm de profundidad sería perfecta, siempre que sea segura) sería la mejor opción.