Kiki, la gorila del zoológico de Boston tiene emotiva reacción al presenciar a una mamá con su bebé en brazos a través del cristal
El video en el que Kiki, la mamá gorila del Franklin Park Zoo de Boston tuvo un tierno gesto al presenciar a través del cristal que la separa de los visitantes a una mamá con su pequeño bebé en brazos se hizo viral y se compartió millones de veces porque evidencia que el instinto maternal es un lenguaje que va más allá de las especies.
Este video se dio a conocer en mayo, por Michael Austin, padre de la criatura que protagoniza el clip y que se llama Canyon. El bebé que entonces tenía cinco semanas de vida, iba en brazos de su mamá, Emmily, durante el paseo familiar y el momento en que observaban a la gorila, ambas madres lograron una conexión especial.
En ese momento, Kiki, la gorila del zoológico estaba junto a su propia cría, llamada Pablo, cuyo nacimiento había acontecido en las semanas anteriores. Kiki observa a Canyon a través del cristal y aparentemente quiere acariciarlo. El propio Michael Austin relató para The Dodo que, “durante más de cinco minutos ella se quedó sentada mirando a Canyon, mirándolo fijamente con cariño”.
En la parte final del clip, la gorila aparentemente desea presentar también a su pequeño Pablo a la familia visitante. Parece que el animal quiere comunicarse explicándole que ella también es madre.
“Cuando entré al zoológico ese día, nunca podría haber imaginado que tendríamos esta experiencia. Estaba asombrada. Tratar de acariciar su rostro a través del cristal y tomar su mano … es lo más hermoso. Podías ver la emoción en sus ojos”, declaró Emmily para 12News ese día.
¿Quién es Kiki?
Kiki, la gorila del zoológico es nativa de África central, es madre de 4 hijos nacidos en cautiverio, el último de ellos, Pablo, nació en octubre de 2020 y como el menor de todos, es el más mimado de la cueva.
Kiki es madre de 4 pequeños gorilas, Pablo es el menor./Foto:Internet
Conexión maternal
En 1971 una gorila llamada Koko aprendió lenguaje de señas gracias al proyecto de una estudiante de psicología. Koko había padecido una enfermedad que la tuvo en cuidados intensivos durante sus primeros meses de vida y no podía ser madre, pero adoptó a un gato. Mostrando que las relaciones interespecies superan las barreras. Esta historia completa la puedes leer aquí.
Y el caso del instinto maternal mostrado por Kiki, en este video reciente no es nuevo, ya en 1996 una primate se convirtió en heroína improvisada al rescatar milagrosamente a un niño de 3 años que cayó dentro de su espacio del zoológico Brookfield de Chicago.