Los presentadores del programa quedaron visiblemente impactados; la mujer convenció a su madre para que la acompañara en esta peculiar actividad.
Una mujer de Narre Warren, Victoria (Australia) hizo una sorprendente confesión durante su programa de radio de Melbourne “Fifi, Fev & Nick” el martes 28 de mayo. En el segmento ‘Cashfessional’, Cheyenne reveló que había comido las cenizas de su abuela.
“Me comí a mi abuela”, dijo Cheyenne, dejando atónitos a los presentadores Fifi Box, Brendan Fevola y Nick Cody. Al ser interrogada sobre cómo había ocurrido, explicó: “Mi abuela falleció en agosto del año pasado y fue incinerada. Estábamos de luto en casa de mi madre, y una noche pensé en animarla un poco… así que probamos las cenizas de mi abuela”.
Cheyenne añadió que después de hacerlo una vez, convenció a su madre para que la acompañara en esta peculiar actividad, ya que no quería estar sola en ello.
La confesión no terminó ahí. Cheyenne también admitió haberle jugado una broma a su hermano, quien recientemente había salido de prisión, haciéndole comer las cenizas de su abuela mezcladas en una salsa para pasta. “Pensé que sería divertido hacerle una broma, así que puse algunas de las cenizas de mi abuela en la salsa”, confesó.
Los presentadores del programa quedaron visiblemente impactados. Fifi Box, de 47 años, reaccionó con incredulidad mientras Fevola, de 43 años, bromeaba llamando al plato “Spaghetti alla nan”. En un video publicado en el Instagram del programa, se puede ver a los presentadores sorprendidos por la historia de Cheyenne
“Esto es mucho para mí”, dijo Box. “Es mucho comer las cenizas de tu abuela”.
Cheyenne también compartió que tiene una “extraña adicción” a las cenizas y que todavía le queda “una caja entera llena”. Box le preguntó si había dejado de comer las cenizas, a lo que Cheyenne respondió: “Diré que sí por tu bien, Fifi”, aunque añadió que lo hacía “solo por diversión”. Después de la llamada, Fevola expresó su sorpresa, diciendo: “Estoy un poco impactado. No me sorprenden muy a menudo”.
“Siento que estamos más unidos que nunca”, dijo Cheyenne sobre su difunta abuela. “Nan vivirá a través de mí para siempre”.