Utiliza tu aguinaldo como un aliado que te dé salud financiera. Estas tres ideas son muy buenos destinos para ese dinero.
El aguinaldo es un derecho de los trabajadores, quienes por ley deben recibir por lo menos 15 días de salario. Es fundamental ser conscientes del esfuerzo y dedicación que conlleva obtener este beneficio: levantarse temprano para ir a trabajar, enfrentar el tráfico, asumir retos laborales y más.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) te invita a que valores cada peso que recibas de aguinaldo y lo gastes de la mejor forma posible. Su recomendación es que gastes cada peso pensando en el esfuerzo que te tomó obtenerlo.
Las fechas en las que se recibe el aguinaldo están llenas de emociones, por lo que una buena forma de evitar hacer compras impulsivas es desvinculando la emoción de la temporada navideña; cuida de no caer en este error, ni en las estrategias mercadológicas.
3 buenas opciones para utilizar el aguinaldo
Para pagar deudas: Procura usarlo para las deudas que te generen mayores intereses. Al reducirlas mejorarás tu salud financiera y, por lo tanto, tendrás menos estrés financiero.
Para recompensar tu esfuerzo: Si planeas comprar algún producto o servicio en estas fechas, es importante cuidar que verdaderamente lo ocuparán tú o tu familia y que favorecerá el crecimiento de su patrimonio, así se puede disfrutar al máximo y por más tiempo.
Para ahorrar o invertir: Haz un esfuerzo por ahorrar entre 5 y 10% del aguinaldo, cuidando siempre que sea en una cuenta que genere rendimientos.