El tiempo es muy importante ya que algunas se asociaron con un aumento en el índice de masa corporal, niveles elevados de azúcar en sangre y tensión arterial alta
La costumbre de la siesta tiene fieles adeptos. Nos permite escapar de la rutina, despejar la mente y revitalizar cuerpo y alma. Pero, ¿qué dicen los estudios científicos sobre su duración ideal? Matthew Solan, Editor ejecutivo de Harvard Men’s Health Watch expuso en una artículo que un reciente estudio (publicado por la revista Obesity en mayo de 2023) que hay un tiempo que no debes pasar para no obtener los efectos negativos de esta práctica.
Las siestas pueden ser una maravillosa herramienta de bienestar si se practican con moderación y cautela. La clave está en encontrar ese equilibrio óptimo entre descanso y revitalización. No lo veas como una práctica de personas flojas, sino como una técnica para tener la energía que necesitas para terminar tus tareas.
¿Cuánto deben durar las siestas?
Solan refiere que en la investigación los hallazgos fueron reveladores: siestas más largas (de 30 minutos o más) se asociaron con un aumento en el índice de masa corporal, niveles elevados de azúcar en sangre y tensión arterial alta. Por el contrario, aquellos que optaron por siestas más breves no sólo evitaban estos riesgos, sino que mostraban menores niveles de tensión arterial en comparación con los que nunca se permitían este placentero descanso.
Los expertos postulan que las siestas prolongadas podrían interferir con nuestros ritmos circadianos, lo cual resulta en un aumento en la resistencia a la insulina y un mayor riesgo de síndrome metabólico. Además, dormir la siesta por períodos más largos podría despertar en nosotros una apetencia por alimentos azucarados.
¿Cada cuanto tomar siestas?
En la misma investigación, los científicos examinaron la frecuencia con la que los participantes tomaban siestas. Aquí, la cifra promedio rondaba las cuatro veces por semana. Sorprendentemente, la frecuencia de las siestas no parecía tener impacto en los riesgos para la salud mencionados anteriormente.
Por lo tanto, el consejo es claro: si disfrutas de tu siesta, procura que no sobrepase los 30 minutos y evita practicarla demasiado tarde, ya que podría afectar tu calidad de sueño nocturno. Las ventajas más claras son:
- Relajación mental y física
- Alivio de la fatiga
- Aumento de la concentración y estado de alerta
- Mejora del humor