En México, sólo existen 55 Centros de Justicia para las Mujeres, pero no ofrecen los mismos servicios ni recolectan la misma información
Del 1 de enero al 31 de junio del 2021 los Centros de Justicia para las Mujeres (CJM) atendieron a más de 164 mil mexicanas, de las cuales 24% tenía entre 20 y 29 años, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en su reporte “Recopilación de Información de los Centros de Justicia para las Mujeres en México 2021”.
“Un punto importante de los CJM es que no es obligatoria la denuncia. Tú puedes llegar a estos centros y decidir no denunciar a tu agresor, porque en muchas ocasiones el miedo a denunciar es un disuasivo para que las mujeres acudan a pedir ayuda”, puntualiza Alejandra Ríos Cázares, Directora General Adjunta de Desarrollo, Análisis e Indicadores de Gobierno del Inegi, en entrevista para Forbes México.
Los CJM empezaron a construirse en México a partir de 2011 y son espacios físicos que concentran servicios especializados de atención integral con perspectiva de género a mujeres en situaciones de violencia, así como a sus hijos e hijas. El tipo de violencia más registrada en estos centros es la emocional (34%), seguida de la violencia física (20%).
Sin embargo, los servicios que se ofrecen no están homologados en todos sus centros, ni tampoco recaban la suficiente información sobre las víctimas de violencia para hacer estadísticas que muestren un panorama real sobre el fenómeno en México. Por lo que la directiva del Inegi sugiere lo siguiente para mejorar su servicio:
Asegurar la cercanía de un CJM a todas las mexicanas
Los Centros de Justicia para las Mujeres (CJM) ofrecen servicios a quienes que ya sufrieron violencia, por lo que Ríos espera que aumente el número de estos sitios para que todas las mexicanas puedan acceder a la ayuda.
“Para poder mejorar la atención a las mujeres lo idóneo sería que los centros se homogeneizaran y que pudiéramos aumentar la cantidad de estos centros, porque hay muchos estados que sólo cuentan con un CJM”, dice.
De acuerdo con información del Inegi, en México tan sólo existen 55 CJM. Coahuila es el estado con el mayor número de estos (cinco). Por otro lado, la mitad de las 32 entidades federativas sólo tienen uno, y Tabasco es el único estado que no cuenta con ningún CJM.
Recolectar más datos sobre los casos de violencia
Ríos asegura que la labor de los CJM está en el punto exacto para prevenir los actos de violencia, pues la información que recaban sobre los casos violentos podría ayudar a la autoridad a hacer mejores campañas para prevenir agresiones en el futuro.
Según el reporte del Inegi, ocho de los 55 CJM no recaban datos básicos de las mujeres que acuden por ser víctimas de violencia:
“Es muy relevante capturar la información de las mujeres que acuden, porque nos permite identificar cuáles son los patrones del fenómeno de violencia, ¿quiénes son las mujeres más violentadas, qué características tienen? y esta evidencia, al final del día, permite un mejor diseño de intervenciones públicas”, argumenta Alejandra Ríos.
Asimismo, apenas el 48% de los centros recopilan información sobre las personas agresoras: “El mayor perpetrador de violencia suele ser la pareja o la expareja. Sin embargo, al hablar de mujeres adultas mayores también pueden ser los hijos o algún otro familiar, pero no lo sabemos con seguridad”, lamenta la directiva.
De acuerdo con el reporte, y a pesar de la falta de registro sobre la situación conyugal, los pocos datos indican que la mayoría de las mujeres atendidas estaban casadas o en unión libre.
Otra área de oportunidad es la forma en que se realizan los registros:
“La mayoría de los centros recopilan información por caso y no por mujer. Entonces, en vez de tener la información de una mujer que fue al centro cuatro veces, ellos tienen cuatro registros diferentes. Por lo que podemos tener una idea de los distintos casos de violencia, pero no necesariamente del número de mujeres violentadas”, advierte Ríos.
Garantizar los mismos servicios en todos los CJM
“Lo que destaca el reporte es que no hay un servicio igual para todos los centros, no es lo mismo que tú acudas al Centro de Justicia de Tlaxcala que al de Aguascalientes”, asegura. Y es que los centros están representados por diferentes instancias, dependiendo del estado en el que se encuentren.
La mayoría de estos centros ofrecen atención psicológica (96%) y atención jurídica (94%), pero el área de atención y monitoreo tan sólo fue reportada por 32 de las 55 CJM. Por el contrario, el área menos reportada fue la de juzgados (40%).
El hecho de que en las instalaciones de los CJM se representan diferentes dependencias como la Procuraduría General de la Justicia, Secretaria de Seguridad Pública y Secretaría de Salud, entre otras, provoca que no exista homologación de sus trabajadores.
Ríos recalca la importancia de que todas las personas que laboran en los CJM reciban capacitación con perspectiva de género. Al respecto, asegura que el hecho de que 58% de los trabajadores esté adscrito a los CJM y el restante 41% sea personal asignado de otras instituciones, no asegura que se les haya capacitado.
“Lo que quisiéramos todos es que no existiera necesidad de que las mujeres asistan a los Centros de Justicia. Sin embargo, cuando los casos de violencia ya ocurrieron lo óptimo sería que los procesos de investigación y de sanción tuvieran una mayor celeridad”, finaliza la funcionaria.