Descubre el trastorno que lleva a las personas a consumir objetos que no son comestibles, explorando causas y tratamientos de esta rara condición
Imagina sentir una irresistible atracción por comer tierra, un gis o incluso cerillos. Esta acción, que parece sacada de una novela de realismo mágico, es una realidad para algunas personas. Se trata del síndrome de pica, un trastorno alimenticio poco conocido y rodeado de misterio.
¿Qué es el síndrome de pica y por qué algunas personas comen objetos no comestibles?
El síndrome de pica, del nombre latino de la urraca que coleccionaba objetos extraños, se manifiesta en el consumo de cosas que no son alimentos. Común en niños pequeños pero también presente en adultos, las razones detrás de este comportamiento son tan variadas como quienes lo experimentan. Un estudio alemán reveló que aproximadamente el 5% de los adultos han mostrado conductas pica al menos una vez, mientras que el 1% se considera recurrente.
Los niños son a menudo los más afectados y se sugiere que hay una mayor incidencia en personas con autismo. Pero más allá de la prevalencia, lo intrigante es la causa de estos antojos. ¿Es ansiedad, una respuesta fisiológica a deficiencias minerales o algo más profundo?
¿Qué lleva a alguien a comer sustancias como la tierra o el almidón?
El impulso puede comenzar con un gusto por olores intensos como el de la gasolina, para progresar hacia la ingestión de sustancias similares. Hay quienes hablan de sus hábitos pica con pasión, comparando diferentes tipos de arcilla o suelo.
Algunas investigaciones sugieren que la ingesta de ciertos tipos de tierra puede tener una función fisiológica, como ayudar a metabolizar toxinas o proteger el tracto digestivo. Sin embargo, este comportamiento también puede llevar a consecuencias dañinas como intoxicación por plomo o peor.
En la búsqueda de respuestas, se ha apuntado a posibles deficiencias minerales. El cuerpo podría estar buscando compensar una falta de nutrientes a través de la ingestión de sustancias no alimenticias. Sin embargo, esto puede ser contraproducente, ya que la tierra también puede absorber hierro y exacerbar problemas como la anemia.
¿Cómo se trata el síndrome de pica?
En los raros casos en que se busca tratamiento, se han utilizado inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), comunes en trastornos como la depresión o el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Estos medicamentos podrían ser efectivos debido a la relación entre la serotonina y los comportamientos compulsivos e impulsivos que caracterizan a la pica.
El tratamiento de la pica implica un enfoque integral, abordando no solo los aspectos físicos sino también los psicológicos del trastorno. A menudo es necesario un equipo de profesionales, incluyendo médicos, nutricionistas y psicólogos, para ayudar a las personas a superar esta condición compleja y mal entendida.