La candidata a la alcaldía de Badiraguato fue inhabilitada en las elecciones del pasado 6 de junio por el Cártel de Sinaloa mediante amenazas y secuestros a sus familiares
Ciudad de México.- Entre los casos denunciados por los líderes de los partidos de oposición en México (PRI, PAN y PRD) ante la Organización de Estados Americanos (OEA), por la presunta intervención del crimen organizado en las pasadas elecciones del 6 de junio, destacó el de Guadalupe Iribe Gascón, quien, tras el secuestro de uno de sus hermanos, renunció el día de las elecciones a sus aspiraciones a la alcaldía de Badiraguato, localidad considerada como la cuna del narco en México.
De acuerdo con el documento entregado por los líderes de oposición a las autoridades de la OEA el pasado 23 de agosto, un mes antes de las elecciones la ex candidata a la presidencia municipal de Badiraguato recibió la noticia de que su designación no era bien vista por los “señores” que mandaban en aquel estado. Incluso, a un mes de haber iniciado campaña, uno de sus operadores fue secuestrado.
Ante estas amenazas, Iribe Gascón contactó a la madre del Chapo Guzmán, María Consuelo Loera, para pedirle que intercediera en su favor y hablara con sus nietos y jefes del Cártel de Sinaloa, Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, también conocidos como Los Chapitos.
La respuesta de la madre de Joaquín Guzmán fue positiva y concisa en un principio: “La política es de los políticos. No nos metemos”.
Sin embargo, el día anterior a la elección alguien en las entrañas del cártel cambió de opinión, pues esa misma noche un cuñado de la candidata fue golpeado y cinco de sus colaboradores amenazados en sus domicilios.
Al día siguiente, en plena fecha de elecciones, un hermano de la candidata fue secuestrado y ella misma se presentó en el ministerio público para denunciar el hecho y dar entrevistas a los medios de comunicación.
“Hace media hora levantaron a mi hermano. Un grupo de hombres armados llegó a una palapa en tres vehículos y se lo llevaron. Yo lo único que pido es que me devuelvan a mi hermano, yo no quiero la candidatura a presidencia municipal, me deslindo…”, declaró Iribe Gascón.
En la tierra de los narcotraficantes más famosos del mundo, como Joaquín El Chapo Guzmán; Rafael Caro Quintero; Ernesto Fonseca, Don Neto, y Juan José Esparragoza Moreno, El Azul, fundadores del Cártel de Sinaloa, los comicios se disputaron al son del crimen organizado.
“Quiero ser una mujer que trabaje para sacar adelante a sus hijos, tener una familia, a mis hermanos y a mi equipo sanos. Aquí estoy ante el Ministerio Público denunciando esta situación. No ha sido sólo este caso, anoche nos levantaron a un cuñado junto con otro compañero, los soltaron todos golpeados. Hoy en la mañana llegaron a cinco casas de aquí de la cabecera, de nuestros operadores, tumbaron puertas, los amenazaron y a otros los golpearon”, explicó.
La candidata también atribuyó a su contrincante de Morena-Partido Sinaloense, José Paz Elenes, la autoría intelectual de los atentados.
Según el documento con la relación de hechos entregada a la OEA, citado por el periodista Héctor de Mauelón, en los estados de Guerrero, Guanajuato, Baja California, San Luis Potosí, Veracruz, Sinaloa, Estado de México y Michoacán, se registraron eventos similares con el crimen organizado en los días rodearon a las elecciones.
Asimismo, en el documento se hizo el recuento de lo ocurrido en Sinaloa, donde el cártel de los Chapitos operó para inmovilizar a la estructura electoral de PRI; de lo ocurrido en el Estado de México, donde la Familia Michoacana operó para desactivar candidatos incómodos, tal como fue el caso de la candidata Zudikey Rodríguez; de lo ocurrido en Guerrero y Michoacán –este último estado en donde el CJNG operó abiertamente en favor de Morena, según consta en denuncias firmadas con nombre y apellido por funcionarios y representantes. También como ocurrió en Guanajuato, San Luis Potosí y Veracruz.